Dentro del sector de la metalurgia el conformado de los metales forma parte de los principales procesos de la historia, alcanzando su máximo desarrollo en las últimas décadas del siglo XX gracias a las nuevas tecnologías
En la actualidad los modernos sistemas de control proporcionan una mayor precisión a las prensas plegadoras, que emplean equipos computarizados de alta precisión, así como una serie de prestaciones en el tratamiento de chapas o láminas metálicas.
Cuando hablamos del plegado o el doblado de chapas nos referimos a un proceso conformado sin arranque de material y con deformación plástica, que da lugar al doblaje de la chapa hasta alcanzar un determinado ángulo. Para poder llevar a cabo este proceso se emplea la prensa plegadora, donde la chapa a conformar se encuentra ubicada sobre la matriz. Así, la chapa se deformará en el momento en el que sufra el impacto producido por el punzón, que se acciona por la parte móvil de la plegadora.
¿Qué tipo de prensas plegadoras existen en el mercado?
Para el sector metalúrgico existen cuatro tipos de plegadoras. La elección de una u otra va a depender de la aplicación que se le quiera dar, la exactitud que se precise para el corte, la capacidad de producción y la repetitividad.
De igual modo, teniendo en cuenta el mecanismo utilizado para la acción de plegado, actualmente existen cuatro tipos de máquinas plegadoras:
- Plegadora manual: este tipo de plegadora dispone de un tamaño muy reducido y su uso es muy sencillo, lo que permite transportarla fácilmente. Solamente se emplea para el doblaje de láminas muy delgadas, que van es el calibre 20 hasta el 8-9, siempre dependiendo del material que se vaya a doblar (hierro, aluminio o acero inoxidable). Asimismo, debido a la alta eficacia de esta plegadora se puede conseguir un gran ahorro energético.
- Plegadora hidra- mecánica: este tipo de plegadora guarda una gran similitud con la mecánica, pero en este caso el volante de inercia es reemplazado por una bomba hidráulica, que será la responsable de facilitar la inercia necesaria para accionar el pisador. A través de esta presión hidráulica un eje excéntrico se accionará mediante un motor hidraúlico, generando un movimiento ascendente y descendente del pisador, al mismo tiempo que generará la potencia requerida para el plegado de la chapa.
El valor añadido que tienen las plegadoras hidra- mecánicas en comparación con las mecánicas, reside en que las primeras no necesitan completar una carrera para poder alcanzar el tonelaje máximo ya que, por el contrario, éste puede alcanzarse en cualquier punto de la carrera.
- Plegadora hidraúlica: es la máquina de plegado más moderna y eficaz que existe actualmente en el mercado. Durante su funcionamiento esta plegadora hace uso de una bomba hidráulica, así como también de cilindros hidráulicos, lo que permite impulsar el pisador, proporcionando una gran exactitud, velocidad y eficiencia. De igual modo, las plegadoras hidráulicas están accionadas por CNC, dando lugar a que el sistema de válvulas pueda ser controlado, a la vez que también sea capaz de otorgar al pisador una gran exactitud en los ángulos de plegado.
- Plegadora mecánica: dispone de un sistema que permite introducir un volante de inercia que genera la energía para poner en funcionamiento el pisador, lugar donde se encuentra alojado el punzón. El volante de inercia se conecta con el pisador a través de un dispositivo mecánico, que hace que el volante acumule la inercia en el momento en el que se encuentra desacoplado. De este modo el volante acumula la inercia y así, al acoplarse, permite que se ejecute el movimiento ascendente y descendente del pisador. Posteriormente, toda la inercia que se ha almacenado se empleará para generar el tonelaje necesario para el proceso de plegado.